Introducción
El cannabis ha sido objeto de debate y estudio durante décadas, y sus efectos en la salud y el bienestar humano son tema de interés constante. En este artículo, exploraremos las conexiones entre el sexo y el consumo de cannabis, analizando su relación histórica, los efectos que puede tener en la sexualidad, los posibles beneficios y riesgos, así como consejos para utilizarlo de manera responsable y segura en el ámbito sexual. Además, destacaremos la importancia de la comunicación y el consentimiento en las relaciones sexuales que involucren el uso de cannabis. A través de esta investigación, buscamos brindar una visión objetiva y científica sobre este tema, proporcionando información relevante para aquellos interesados en explorar esta interacción entre el cannabis y la sexualidad.
1.La relación histórica entre salud mental y cannabis
La marihuana afecta especialmente las partes del cerebro responsables de la atención, la coordinación, la toma de decisiones, el aprendizaje, la memoria y el tiempo de reacción, según los CDC.
Hay efectos que suceden a corto plazo, es decir después de consumir la sustancia. Pero hay otros, vinculados al desarrollo del cerebro, que pueden ser de largo plazo.
2.Los efectos del cannabis en la sexualidad
Una investigación publicada este año analizó estudios hechos sobre más de 43.000 personas y descubrió el impacto del THC en los niveles superiores del pensamiento del cerebro, que además de las funciones mencionadas anteriormente también es el responsable de planificar, organizar y resolver problemas, así como controlar las emociones y el comportamiento.
El impacto de la marihuana en el cerebro puede ser especialmente perjudicial para el desarrollo cognitivo de los jóvenes, cuyos cerebros aún se están desarrollando.
De hecho, según los CDC, consumir antes de los 18 años puede afectar «la forma en que el cerebro crea las conexiones para funciones tales como la atención, la memoria y el aprendizaje». En consecuencia, los adolescentes que la consumen podrían tener un rendimiento menor en la escuela. (Aunque hay que tener en cuenta que los efectos a largo plazo también pueden deberse a otros factores como la genética o ambientales).
3.La influencia del cannabis
El cannabis puede ejercer influencia en el deseo sexual y la excitación de las personas. Algunos estudios han encontrado que el consumo de cannabis puede aumentar el deseo sexual en ciertos individuos. Esto podría estar relacionado con el efecto relajante y desinhibidor que puede tener el cannabis, lo que puede permitir que las personas se sientan más abiertas y receptivas a la intimidad sexual. Además, se ha observado que el cannabis puede influir en la excitación sexual. Algunos usuarios han reportado que el consumo de cannabis puede intensificar las sensaciones físicas y emocionales durante el encuentro íntimo, lo que puede resultar en una mayor satisfacción sexual. Esto podría estar relacionado con los efectos del cannabis en el sistema endocannabinoide, el cual está involucrado en la regulación de la respuesta sexual. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los efectos del cannabis en el deseo sexual y la excitación pueden variar de una persona a otra. Algunos individuos pueden experimentar un aumento significativo en el deseo y la excitación, mientras que otros pueden no experimentar cambios notables o incluso experimentar una disminución en la libido. Además, la dosis, la cepa y la forma de consumo del cannabis pueden influir en los efectos que tiene en la sexualidad. En resumen, el cannabis puede influir en el deseo sexual y la excitación de las personas. Algunos individuos pueden experimentar un aumento en el deseo y la intensidad de las sensaciones sexuales, mientras que otros pueden no experimentar cambios notables. Es importante tener en cuenta que cada persona es única y que los efectos del cannabis pueden variar ampliamente. Como siempre, es recomendable tomar decisiones informadas y consultar a un profesional de la salud antes de utilizar cannabis en el ámbito sexual.
El mayor consumo de marihuana con concentraciones altas de THC también se ha asociado a un aumento de los casos de psicosis, en las que la persona pierde el contacto con la realidad y puede, por ejemplo, escuchar voces y tener delirios.
